Iron Maiden anunció que para la gira de promoción de su nuevo disco “The Book of Souls”, la banda se transportará en un Boeing 747-400 especial, al que llaman “Ed Force One” (en referencia a la mascota de la banda, cuyo nombre es Eddie)
No es la primera vez que Iron Maiden se traslada en su propio avión durante sus giras. En el tour Somewhere Back In Time World Tour 2008 y 2009, la banda utilizó un Boeing 757-200 arrendado de la compañía Astraeus. Para la gira The Final Frontier World Tour, Iron Maiden rentó otro 757 con matrícula G-STRX. Ésto le permite realizar conciertos en lugares donde antes no lo habían podido hacer.
Este nuevo disco de la banda será presentado el 4 de septiembre y su tour comenzará en 2016. El capitán de esta nueva aeronave será el mismo cantante, Bruce Dickinson, quien también piloteó los 757 y ahora se encuentra capacitándose para adquirir la licencia que le permita volar el Boeing 747. El nuevo Ed Force One llevará a la banda, a su staff y 12 toneladas de equipo a lo largo de 88,500 kilómetros alrededor del mundo, visitando 35 países de 6 de 7 continentes.
La banda está afinando los últimos detalles del tour y en los próximos días anunciarán las fechas exactas y los lugares que visitarán, pero por el momento, se sabe que The Book Of Souls World Tour comenzará en Estados Unidos a finales de febrero, a inicios de marzo, la banda y el nuevo 747 Ed Force One visitará México, seguido de conciertos en países como El Salvador (donde tocarán por primera vez) y Costa Rica, Argentina, Chile, entre otros. Para los conciertos en Europa, la banda también utilizará este avión.
Bruce Dickinson, quien aparte de cantar en la famosa banda de heavy metal y ser piloto aviador, se desempeña como Vice Presidente y Jefe de Ingeniería para el programa del 747 para Boeing comenta al respecto: “Cuando se presentó la oportunidad de rentar un Boeing 747 a nuestros amigos de Air Atlanta Icelandic para la gira, definitivamente la tomamos. ¿Quién no lo haría? El mayor beneficio de viajar en un 747 es que debido a su colosal tamaño y capacidad de carga, podemos transportar nuestro escenario y equipo sin hacer modificaciones en el compartimiento de carga como las que tuvimos que hacer en el 757. Lo único que tenemos que hacer es pintar el avión y mover unos cuantos asientos con la ventaja de que tendremos mucho más espacio para la banda y staff, además de que el avión viaja mucho más rápido, a velocidades de Mach 0.85, recorriendo distancias de hasta 13 mil kilómetros, lo que significa que no tendremos que hacer escalas para recargar combustible, como con el 757.”
“Sin embargo, a pesar de los trabajos de logística que ya realizamos, yo todavía debo aprender a volar el avión antes de que podamos ir a cualquier lado, así que actualmente me encuentro realizando mi certificación como piloto y capitán de Boeing 747. Me encuentro haciendo esto en Cardiff Aviation, mi centro de mantenimiento en Gales, donde tenemos un fantástico simulador de 747.”
Fuente: En el Aire
